Blogia
No hay nadie como tu

Jugando

Jugando A veces eres todo un diablillo. Cuántas veces te has metido conmigo sólo para ver mi reacción, y la verdad es que lo consigues.

Recuerdo el día en el que me dijiste que te habías afeitado la cabeza jajajajaja. Mira que eres malo. Lo creí completamente y pensé que no te conocía en absoluto, porque nunca te hubiera creído capaz de hacer eso... tú, con lo presumido que eres...

También te encanta que te pida mil veces las cosas. Que me cuentes algo interesante... que me enseñes algún texto... y no paras hasta que me descubro suplicándote. En ese momento estallas en risas otra vez, y puedo imaginarte mordiéndote los labios, como un niño que acaba de hacer una travesura.

0 comentarios