Cabezota

Eres muy muy muy cabezota. Es increíble. Cuando algo se te mete entre ceja y ceja, no atiendes a nada. A veces me escuchas, pero no cambias de opinión.

Algo que sueles hacer es dar tu versión, o sea, que sueltas el monólogo y... ya es imposible meter baza en la conversación. Mejor callar y decir unos cuantos monosílabos, porque como me ponga a hablar, ni me escuchas de lo enzarzado que estás hablando solo.

Con lo de mi primo aún queda por decir. Recuerdo que te estaba comentando algo sobre la homosexualidad. No sé cómo lo dije, pero en tu cabeza parecía que habían saltado todas las alarmas, porque te pusiste echo una fierecilla -dentro de tu habitual tranquilidad- y no me dejabas explicarme. Ya estabas atento a todo, muy puntilloso.

A la hora de discutir también eres cabezota, y te gusta llevar razón. Pareces tauro. Siempre tienes respuesta para todo. Cuando no me comentas en el blog, pones mil excusas con tal de no dar tu brazo a torcer y reconocer que no lo haces porque no te da la gana. Cuando no me escribes email, lo mismo. En fin...

Objetivo

A veces me sorprendes. Eres una persona sensible pero ha habido momentos en los que has dejado de lado esa sensibilidad y has abordado el tema fríamente. Por ejemplo, cuanto te conté que mi tía y mi abuela habían muerto. Lo sentiste por mi, pero a la vez me hablabas de que es "ley de vida", y que eso lo debía tener presente siempre. Mira, aunque lo sabía, no podía evitar que me doliera.

También en el tema de mis sentimientos hacia Ojos Tristes. Nunca me has entendido. Desde fuera lo has visto como algo pasajero, que tendría que acabar o apuntar hacia una nueva dirección, cuando dentro de mi, era todo lo contrario.

Lo de mi primo es otro punto como estos. Yo estuve muy pensativa al enterarme, más que nada porque trataba de asimilar esa nueva realidad de la que no me había percatado ni por asomo. Nunca tuve sospechas. Y tú lo veías todo muy bien, pensando que exageraba. Ahora que has vivido la misma historia -toda una casualidad, por cierto- te he visto justo como me vi yo. Queriendo que esa persona fuera feliz sea cual sea su condición, pero pensando también lo que se les puede venir encima si los de su alrededor no lo aceptan.

Con estas cosas he podido comprobar que tú lo ves objetivamente -lo cual es normal- pero eso te hace un poco frío y racional. Es muy fácil hablar cuando no se está en el pellejo del otro, pero si se trata de uno mismo...

Belleza femenina

Siempre te he visto como una persona que adora la belleza femenina. La delgadez, la manera de caminar, de mirar... Por eso no me extrañó nada cuando me dijiste que de pequeño, tu amor platónico había sido Rita Hayworth. Ella fue una mujer que emitía elegancia con solo su saber estar.

La verdad es que no te imagino loco por una chica despanpanante tipo Pamela Anderson, pero también sé, que la mirada se te iría detrás... jajajaja.

De profesión papá

Eres un papá. Sé que leer esto no te va a extrañar, más o menos lo tenías que esperar, pero es que no lo puedes evitar.

Siempre me estás dando consejos como si fueras mi padre. Por ejemplo con los estudios. Pero la gota que colma el vaso es el tema de la espalda. Uff, ¡¡qué pesado el mediquito!! Un día estaba cansada de que me dieras la charla, y te pedí que me dejaras en paz, que yo no me metía en tus cosas. Y al principio te disculpaste, pero después dijiste “mira no, no me puedo callar” y seguiste… (En el fondo… te agradezco que te preocupes).

Una cosa que me hizo mucha gracia fue que te estaba comentando lo que me gusta El Retiro, sobre todo las partes más solitarias. Y tú, de repente, dijiste “es inseguro”. Te juro que me partí de risa en el instante. Rompiste con todo el encanto de lo que te estaba contando…

También me cuidas en la alimentación, en las palabras que está bien que las diga una señorita jejeje… Siempre siempre siempre me aleccionas con cuentos o historias de cuando eras pequeño… Y mil cosas más papaíto, jajajaja.

Ciencias

Aunque eres de letras, se nota que te encantan. Muchas veces me has pedido que te cuente cosas curiosas o incluso que te explique el motivo de por qué pasan otras.

No sé si te has preguntado por qué las aves emigran a otras zonas cuando empieza el otoño. Son muy listas, pero no lo hacen porque sientan el frío, tiene que ver con el núcleo de la tierra. Sabes que la tierra está magnetizada por la cantidad de metales que contiene en su centro. Pues bien... en las cabezas de algunas aves, existen pequeñas partículas de un metal (la magnetita) que se orienta atendiendo al giro de la tierra. Por eso ellas sienten esa atracción y saben que deben desplazarse.

Pero qué niñito eres...

Si es que eres un niño grande... Siempre estás jugando, ya sea con palabras, con textos, con ideas...

Me gusta que estés dispuesto a hacer cosas nuevas, a experimentar. A veces te he dicho entusiasmada "ay Alberto, ¿te apetece que hagamos ésto?" y tú has contestado igual de eufórico "¡venga vamos! ¡¡marchando!!"

Me parece muy noble...

... tu manera de pedir perdón. Lo haces con una sinceridad... que conmueve.

Justificaciones

Algo que me sienta un poco mal, es que buscas justificación para todo. Y no sé por qué lo haces.

Al final he llegado a la conclusión de que tratas de ver las cosas desde diferentes puntos de vista, para no encasillarte. Aunque a veces trates de justificar hasta lo que va en contra de tus principios... Esto suele ocurrir cuando hablas por otros, defendiéndoles cuando alguien protagoniza nuestras conversaciones.

Un día aluciné, pero preferí no decirte nada. Me hablabas sobre la infidelidad, y aunque fue algo que te partió por la mitad, y que hubieras preferido no tener que pasar por ello... decías que tal vez estaba justificada por cómo estaba la relación por entonces. Y que incluso lo preferías a una pareja que se mantenía lineal y monótona.

¡Pijo!

Anda que no eres pijo... ¿Sabes con lo que me río mucho? al recordar la frase que empleaste para decirme que te faltaba una muela. Verás:

Según tú: Sí, se me perforó una muela y me la tuvieron que extraer.
Según cualquier otro mortal: Sí, se me hizo un agujero en la muela y me la tuvieron que sacar.

Jajajajajajaja, jajajajajaja...

Perfectamente perfecto

Más de una vez te he calificado como perfectamente perfecto, y siempre me has pedido que te diga el por qué. Voy a intenter explicártelo cómo pueda, pero es algo que me cuesta pero siempre me ha llegado de ti. Significa que dices lo que quieres decir de tal menera que no dañe ni moleste a la persona con la que estás hablando.

Te pondré un ejemplo... En mi regalo de cumpleaños decías que te daba pena no haber podidi plagiar mi forma "compleja" de escribir. Y añadiste -ésto es a lo que me refiero- que decías compleja por todo lo que lograba transmitir. Con ésta última frase además de aclarar conseguiste que me sintiera halagada, y quitaste lo negativo que puidera sonar la palabra "compleja".

Otro ejemplo... cuando a veces te justificas por no tener tiempo en escribir emails, dices: "no sé por qué me cuesat ¡y eso que es algo que me encanta hacer!". Aquí otra persona diría simpolemente que no ha tenido tiempo, pero tú quedas mejor con eso.

Tu gran virtud

No voy a decir que tu mayor virtud es que sabes escuchar, y mira que siempre he destacado eso de ti. Pero lo supera con creces tu PACIENCIA.

Cuántas veces me he puesto pesada, me he enfadado por tonterías, no he dado mi brazo a torcer y tú... tú has esperado a que me calmara, que pasara la tormenta de mi desahogo...

Hace poco, uno de los días en los que me había molestado de nuevo, se te veía con ganas de animarme. Y sé que ya no sabes qué inventarme para hacerme reír... Al final, me engañaste, y como haces con los niños llamaste mi atención con otra cosa, para que me picara la curiosidad y dejara de pensar en lo que me ponía triste. Y yo... quiero que sepas que me doy cuenta de esas cosas pero me gusta dejarme llevar por ti, y me resultas tan entrañable que si se pudiera medir el cariño, en ese momento sé que te quiero un poco más. A mi me costaría mucho no dejarme llevar por el mosqueo de la otra persona. Por eso admiro el que tú no lo hagas.

Eres tan tan tan cariñoso en esos momentos... Mira, léete. Dices cosas como:
(por favor, no me odioes por las cosas que te digo ni por enfadarme tanto...)
(no puedo odiarte...)

Trabajando

Te encanta tu trabajo, y eso se nota cada vez que hablas de los niños. Eres muy responsable, y te gusta hacer las cosas bien, dar lo que esperan de ti (aquí añadir alguna historia de los niños, lo de Antonio).

Me hace gracia algo... y es que, debido a esa responsabilidad, se te borra de un plumazo tu despiste (jajaaja) y poner todos tus sentidos en lo que estás haciendo.

No necesitas...

No necesitas que te demuestren nada con palabras, te basta con percibirlo y sentirlo. Pero como a todos, también te gusta escucharlo.

Cuando yo era tan sincera en sentimientos, te veía pegado y abrazado a esas palabras. Ansiando escuchar más.

Pisas sobre seguro

No temes equivocarte proque intentas aprender de los errores. Sin embargo, piensas mucho las cosas antes de arriesgarte. Lo de perder por completo la seguridad, no es lo tuyo...

Eres huella

Eres una persona que deja huella en los demás. Tu forma de ser... de escuchar, de preocuparte por nosotros... no te hacen pasar desapercibido. Eso lo he podido observar con las personas del foro, aquellas con las que tampoco has compartido mucho, te recuerdan con cariño, y se quedan con tus palabras.

Para mi, te diré, que no serás una huella. Conmigo ha sido diferente. Un día te dije que tú has dejado una marca en mi. Las huellas se pueden borrar, y se recuerdan como algo bonito que una vez tuvimos. Pero las marcas, son para toda la vida.

Sueños

Tienes mil sueños que cumplir Alberto. Siempre he pensado que son el motivo de seguir viviendo con ilusión. En el momento en el que nos quedáramos sin sueños, ¿qué haríamos?

Tú eres muy responsable, y aún con ganas de sueños los construyes poco a poco. No ha sido una vez si no muchas las que me has animado en los estudios, diciéndome que me quedaba muy poco para empezar a cumplirlos, que no flaqueara ahora que estoy tan cerca...

Mira, esta foto me gusta, porque cuando se buscan sueños y se cumplen, parece que hemos alcanzado una estrella. Y después, a continuar soñando...

Jugando

A veces eres todo un diablillo. Cuántas veces te has metido conmigo sólo para ver mi reacción, y la verdad es que lo consigues.

Recuerdo el día en el que me dijiste que te habías afeitado la cabeza jajajajaja. Mira que eres malo. Lo creí completamente y pensé que no te conocía en absoluto, porque nunca te hubiera creído capaz de hacer eso... tú, con lo presumido que eres...

También te encanta que te pida mil veces las cosas. Que me cuentes algo interesante... que me enseñes algún texto... y no paras hasta que me descubro suplicándote. En ese momento estallas en risas otra vez, y puedo imaginarte mordiéndote los labios, como un niño que acaba de hacer una travesura.

Percepciones

Estamos de acuerdo en que cada uno tiene una forma muy particular de observar lo que nos rodea. Incluso uno mismo lo puede ver diferente según sea su estado anímico.

Contigo ha sido un juego desde el principio, contarnos lo que nos llegaba a cada uno de las cosas... Hemos aprendido mucho, sutilezas que al otro se le escapaban, porque "el filtro" es distinto.

Sonrisas

No, ahora no toca hablar de cine. He escogido esta foto porque me encanta cómo se miran entre ellos y lo bien que lo pasan juntos. Es algo que me ha llamado la atención de ti, tu sentido del humor y las ganas que tienes siempre de hacerme reír. Desde luego, es la mejor manera de tomarse las cosas, y mucho más agradable que estar enfadados, ¿verdad? Me encantaría tener la capacidad que posees tú para separar las cosas y borrar aquellas que no tienen importancia, pero que nos hacen sufrir.

¿Quedamos?

Es algo increíble. Siempre, cada vez que hemos hablado, nos ha parecido que quedábamos para tomar café. Esas charlas que duraban horas y en las que la conversación era fluida... No con todo el mundo se consigue, ¿verdad? Además, cuánto más hablábamos, más cosas quedaban por contarnos...